Cuándo cambiar tu colchón por otro nuevo
No descansar lo suficiente puede tener efectos sobre la salud física, mental y emocional. Las deficiencias en la calidad del sueño afectan a tu calidad de vida y conlleva consecuencias importantes en la capacidad de funcionamiento de tu cerebro, reduciendo la concentración, la productividad o incluso provocando una mayor sensación de estrés. Por eso, es importante saber cuándo tu cuerpo te pide un cambio de colchón.
¿Duermes mal? ¿Te levantas con dolor de espalda? ¿Tienes la sensación de no haber descansado aunque hayas dormido tus horas habituales? Si has contestado afirmativamente a alguna de estas preguntas, puede que haya llegado el momento de cambiar tu colchón.
La vida útil de un colchón depende de varios factores, como la calidad del colchón, el tipo de material utilizado, la constitución física de quien duerme y el cuidado y mantenimiento que se le dé.
Además, las preferencias y necesidades de cada persona también pueden influir en la decisión de renovar el colchón.
En este artículo te explicamos los factores que tienes que tener en cuenta para saber cuándo ha llegado el momento de cambiar tu colchón.
Contenido:
¿Cada cuánto tiempo cambiar el colchón?
Las razones más comunes para cambiar un colchón, aparte de las condiciones higiénicas y el desgaste, son, sobre todo, las molestias físicas y la aparición de nuevas necesidades personales. Los cambios de peso y los dolores de espalda son motivos frecuentes para cambiar de colchón.
Además, si notas que la calidad de tu sueño es deficiente desde hace un tiempo, durmiendo entre 6 y 8 horas al día, deberías plantearte cambiar de colchón cuanto antes para que lo que es temporal no derive en problemas de salud a largo plazo.
Por otro lado, si detectas que el colchón presenta hundimientos o que no recupera su forma habitual, también es síntoma de que debes sustituirlo.
La vida útil de cada colchón se determina por la calidad del material y sistemas de fabricación, así como el uso, el cuidado y mantenimiento que se le da. Normalmente siempre se recomienda cambiar el colchón a los 10 años, para evitar que el desgaste de los materiales pueda afectar a tu salud y tu bienestar. Pero podemos decir a grandes rasgos que:
- Colchones de látex: los colchones de látex suelen tener una vida útil más larga debido a que su deformación es menor. El látex es un material altamente resiliente.
- Colchones de muelles: los colchones de muelles de hilo continuo son resistentes y durables gracias a su alta transpirabilidad y su refuerzo perimetral.
- Colchones de muelles ensacados: los colchones de muelles ensacados destacan por no transmitir el movimiento de un muelle a otro, ya que están separados por saquitos de tela independientes, por lo que el interior del colchón no roza y no sufre con el paso del tiempo.
- Colchones de espuma viscoelástica: se suele decir que son lo que menos vida útil tienen, pero hay que tener en cuenta que los expertos fabricantes están a la vanguardia en tecnologías que mantienen cada vez más tiempo las espumas para que estas sigan ofreciendo su confort como el primer día. Además, añaden un extra de transpirabilidad e higiene a tu descanso gracias a sus núcleos más porosos.
¿Cómo saber que es el momento de renovarlo? Indicios
Los fabricantes recomiendan sustituir los colchones cada 10 años o cuando empieces a notar puntos de hundimiento en el colchón, momento en que tu posición ya yo será la correcta durante el descanso y tu cuerpo se tensará para compensarlo.
En Bed’s, como especialistas en descanso hemos recopilado los indicios más importantes para que te sea más fácil saber cuánto durará tu colchón. Te los detallamos a continuación:
1. Calidad y materiales de fabricación del colchón
La duración de un colchón varía mucho dependiendo del material y de la calidad con que esté fabricado. Es algo a tener en cuenta en el momento de la compra o renovación, que aunque algunos cuesten ligeramente más, al final compensa porque, por un lado, lo usarás durante más tiempo y, por otro lado, porque tendrá más efectos positivos en tu bienestar.
2. Razones de higiene
Mientras dormimos nuestro cuerpo desprende calor que llega en forma de humedad al interior del colchón. No toda queda atrapada en la ropa de cama y la funda o protector, también llega al colchón. Por eso es importante elegir un colchón y base de cama transpirable, sobre todo, cuando tu dormitorio es húmedo o vives en una zona de costa o de altas temperaturas.
Una solución para evitar que la humedad deteriore el colchón es utilizar cubrecolchones. Pero sin duda, las medidas de higiene más importantes para aumentar la vida útil de tu colchón son airear, girar y voltear en el caso de que tu colchón te lo permita.
Se recomienda girar el colchón (intercambiar los extremos de la cabeza y los pies) y voltearlo (hacia delante o hacia atrás) regularmente, según indicación del fabricante. Puede que tu colchón no sea reversible, eso quiere decir que concentra todos sus beneficios en una de sus caras de descanso y, en ese caso, deberás girarlo cada 6 meses.
Con esto evitarás, en la medida de lo posible, el hundimiento de las superficies y la acumulación de humedad y ácaros. Hay gente que se da cuenta de que es hora de cambiar su colchón cuando por la noche, sufre picor nasal y estornudos, síntomas de alergia.
3. Sueño intranquilo y cansancio al levantarte
Hemos dejado para el final el indicador más importante para saber cuándo cambiar tu colchón: la calidad de tu sueño.
Cuando hablamos de la calidad del sueño, nos referimos a la capacidad de dormir profundamente, sin interrupciones y despertar sintiéndonos llenos de energía. Es decir, descansar de verdad. Un estudio de 2009, publicado en el Journal of Chiropractic Medicine, confirmaba que la calidad del sueño de los participantes «mejoró significativamente tras cambiar su colchón, que tenía al menos 5 años de antigüedad».
El nuevo colchón permitió a los participantes de este estudió mejorar un 70% la comodidad de su sueño, un 62% la calidad del sueño, un 55% el dolor de espalda y un 50% la rigidez de la columna vertebral.
Si últimamente te despiertas sintiéndote más cansado de lo normal, si notas dolores en el cuello, la espalda, los hombros o en cualquier otra parte del cuerpo al levantarte de la cama,o hace mucho tiempo que duermes sobre el mismo equipo de descanso, probablemente haya llegado el momento de cambiar de colchón, independientemente del material o el mantenimiento que le hayas hecho.
Consúltanos tus dudas, contamos con los profesionales que más saben de descanso para guiarte en la elección del colchón que más encaje contigo.
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